Soy una rumbera porque no me queda más remedio…

Bueno. Han pasado ya más de dos días desde que me mude. La cosa pinta bastante bien, pero bueno, habrá que dejar aun unos días mas para que todo este bien asentado y bien digerido.
La faena en la gran S va perfectamente, pero vamos, aun tiene que por las tardes acabar de arrancar, que esta la cosa flojilla. Normal, tampoco ha empezado en serio la Uni. Estos días voy como un loco, por la mañana hago viajes, me conecto, voy a la Bote y después mi larga jornada, pero merece la pena, porque disfruto como un gorrino. Pero lo dicho unas letras antes, a ver si en esta semana ya se acaba el traslado y acabo de disfrutarlo bien todo. Mi vida, o sea, mi etapa nueva ha comenzado conjuntamente con Muchachada Nui, el programa mas freak y cutre-lux del panorama televisivo...vamos, que me encanto el inicio de mis nuevas andaduras. Me quedo con Enjuto Mejuto ‘y las aventuras del Joven Rappel. Para partirse el Ojete!!!
Ahora en casa me toca hacer de pacificador, porque la cosa esta mas revuelta que la ONU en unas de sus sesiones plenarias. Es difícil intentar contentar a todo el mundo, es bastante chungo, pero bueno, mis artes diplomáticas están ante todo. Tengo una escuela que no veas. Demasiados años que llevo intermediando con todo el mundo para adquirir experiencia. Que asco que me doy. Y mi viejo esta ilusionado, espero que salga hacia delante y sea como el Ave Fénix, que resurge de sus cenizas otra vez para demostrar a este asqueroso mundo que todos tenemos una segunda oportunidad. Bueno, me voy a La Botellita a regar las plantikis, que están más secas que mi cuenta a mediados de mes. Y hecho de menos a la Jara, y la pobre chita esta temblando como un flan…